¨De pronto senti los dedos ansiosos que me soltaban los botones de la camisa, y senti el olor peligroso de la bestia de amor acostada a mis espadas, y senti que me hundia en las delicias de las arenas movedizas de su ternura. Pero se detuvo de golpe, tosio desde muy lejos y se escurrio de mi vida.¨
-Grabriel Garcia Marquez.
Yo voy por el siguiente ...